miércoles, diciembre 01, 2010

Nunca Fue Extraño


Las calles parecían sostenidas por tu ausencia. O por tu permiso. Apenas era una sombra, un testimonio ni siquiera muy claro de lo que pueden traer los años. Ya comenzaba a vagar por entre los establecimientos y las conversaciones como una muestra del hombre que se aleja. No podemos decir que fuera primavera.

No lo supieron enseguida. No pensaron nada. Ya no podían con su fe de niños ¿Quién sabe ya de planes y recuerdos? Fue una noche entre las figuras que empañaban un muro. Nadie puede recordarlo. Algo que se tiraba a la basura porque hace daño.

La soledad de un bar que está cerrando. El ruido del agua y el jabón. Quizás hubo miedo, pero nunca fue extraño.

Son tan distintos que resulta imposible distinguirlos. No se duda de la fuerza del invierno. Y se tienen lejos o cerca. Y es cálido como una manta. Y es ligero y viajan casi sin quererlo.

No hay comentarios: